Los esquemas tradicionales de la historia y la arqueología oficiales se tambalean.
En el Kurdistán, hace 12.000 años, se construyó un templo o ciudad ritual, con seres demoníacos de piedra. Un campesino lo descubrió por casualidad. Tal vez el lugar donde empezó la historia de la civilización.
Göbekli Tepe, sitio arqueológico del inicio del neolítico, está considerado como el lugar de culto religioso más antiguo del mundo. Situado al sureste de Turquía cerca de la frontera con Siria. Descubierto en 1963, tuvo que esperar hasta mediados de los años 1990 para que científicos alemanes del Deutsche Archäologische Institut (DAI) iniciaran la exploración del lugar.
El conjunto está compuesto principalmente por columnas de tres metros de altura excavadas a partir de la roca de la cima. Las prospecciones geomagnéticas indican que debe de haber unas 200 de ellas. Estos monolitos están cubiertos de relieves grabados con figuras de animales. En muchos de los relieves se han descubierto signos abstractos y geométricos. Göbekli Tepe pudo haber sido un espacio dedicado al culto de los muertos. No se han encontrado ningún vestigio de haber sido habitado. Este lugar nunca fue destruido, simplemente fue enterrado premeditadamente, con tierra y piedras. La DAI pronostica que la exploración se extenderá durante más de dos décadas.
2ª parte